En la noche del 29 al 30 de noviembre, una fuerte explosión sacudió la línea principal Baikal-Amur dentro del túnel Severomuysky, que lleva el nombre de Vladimir Bessolov, situado en Buriatia (Rusia). Este túnel es un enlace ferroviario fundamental entre Rusia y China, utilizado sobre todo para transportes militares. La explosión, en la que se vieron implicados cuatro artefactos explosivos durante el tránsito de un tren de mercancías, ha provocado la paralización de esta ruta crucial para los suministros militares rusos. Según fuentes vinculadas a Ukrainska PravdaSegún la información recibida, el Servicio de Seguridad de Ucrania (SSU) es el presunto responsable de la detonación. La postura oficial del servicio especial sigue sin confirmarse, y mientras el Servicio Federal de Seguridad (FSB) se ocupa activamente de las secuelas in situ, el personal ferroviario se esfuerza por mitigar las repercusiones de lo que supuestamente es una operación especial dirigida por el SSU. El incidente marca un acontecimiento significativo con posibles consecuencias de largo alcance para la infraestructura de transporte y la dinámica geopolítica de la región.
Fuente: Ukrainska Pravda